Alemania
31 de marzo del 2017

Los pasos más firmes dentro de la tradición de la poesía alemana fueron dados, -^sin duda, en el siglo xix. La forma en que Goethe, Schiller y Holderlin empujan y potencian la materialidad y el colorido de su lengua. Posteriormente Rilke y Novalis seguirán elaborando el cuestionamiento mediante el canto hacia la razón que exige mediante la poesía una justificación en la naturaleza. Adrian Kasnitz (Ermland, 1974) salta por las pesadumbres de las vanguardias para rebobinar los alambres que sostienen esa gran tradición que quedó a la intemperie desde la falla ético-política de Theodor Adorno: no se puede hacer arte después de Auschwitz.

La reciente generación de poetas alemanes ha abierto sus horizontes para permear las tradiciones emergentes del siglo xx: Sudamérica y Norteamérica. El entendimiento de estos dos polos ha permitido el flujo del estruendo neobarroco mediante el diálogo que abre la obra de Timo Berger y la sobriedad analítica del tipo objetivista mediante una poeta como Anne Cotten. Estos referentes actualizan la conceptualización del trabajo poético en lengua alemana.

Adrian Kasnizt evalúa su propia tradición, no sólo a partir del monólogo literario sino que sale del esquema textual para “entrar” en el plano geográfico, estrategia que apunta en el poema “In den Wald” (En el bosque). El poeta se aventura como una “bestia tímida” a explorar las ruinas europeas: Soest, Lucca, Tarascon, Atenas, para cuestionar como un turista ¿dónde está la tradición? Kasnitz se para físicamente en esos monumentos, abre los sentidos y cuestiona desde el campo material la creencia, la tradición y las ideologías. ¿Cómo restaurar los puentes rotos? ¿Desde qué espacio volveremos a cantar las ideas sublimes?

Siguiendo la respuesta del doctor Fausto, Kasnitz vuelve los ojos a la sensualidad y nos hace recordar que la experiencia mística sólo es posible expresarse mediante el acto carnal. “Embutido”, “Scarlett Johansson” y “Gruesa con Herodoto” son los ejemplos más claros sobre la experiencia carnal-textual que a su vez reinstala el principio clásico del carpe diem. Al final la experiencia política o religiosa o sensual termina defraudando al sujeto, importa tal vez el aleteo que la convierte en ficción.

POEMAS DE ADRIÁN KASNIZT TRADUCIDOS POR JOSÉ MOLINA



SOBRE LOS TERRAPLENES DE SOEST

Escupes
En el arco, ves las velas de las castañas
sobre los terraplenes de Soest o Lucca
quién sabría decirlo.

La luz es inequívoca
la fina lluvia incesante
y del otro lado sonidos resonantes
de un buscapleitos con perro.
Sin lugar a dudas me parece
que aquí hemos ido de paseo.

(para M. L. K.)

AUF DEN WALLEN VON SOEST

Du spuckst im Bogen, siehst die Kerzen der Kastanien
auf den Wallen von Soest oder Lucca
wer weifi das zu sagen.

Das Licht ist aber eindeutig
der feine nimmer aufhorende Regen
und die hinüber schallenden Laute
eines Bullterriers mit Hund.
Ganz unzweifelhaft kommt es mir vor
dass wir hier spazieren gingen.

(für M. L. K.)]

SCARLETT JOHANSSON

Una exuberante, un ángel
Como el brillo el rostro
Como un apareo, un palomo
Una arruga aleteando

[SCARLETT JOHANSSON

Ein üppig, ein Engel
Wie Glitzer das Antlitz
Wie ein Turtel, ein Tauber
Eine flatternde Falte]

EMBUTIDO

No pescamos, andamos despacio
un poco inútil como tus
piernas larguiruchas, falda demasiado corta.
No besamos, nos detenemos.
Has empacado bocadillos
en un toper. Ah es tan hermoso
aquí bajo los contados sauces.
Nosotros no somos nosotros, solo una casualidad
una desgracia, una excusa perdida.
Haces alusiones, señalo
a la distancia. En el Ruhr
los peces emigran río abajo.

(para NICOLÁS BORN)

[AÜFSCHNITT

Wir angeln nicht, wir schlendern
ein wenig nutzlos wie deine
schlaksigen Beine, zu kurzer Rock.

Wir küssen nicht, wir rasten.
Du hast Brote eingepackt
in eine Tupperdose. Ach so schon
ist es hier unter abzáhlbaren Weiden.

Wir sind nicht wir, bloS ein Zufall
ein Missgeschick, eine verpasste Ausrede.
Du machst Andeutungen, ich weise
in die Ferne. Die Ruhr hinab
ziehen Fische.

(für Nicolás Born)]

PAISAJE CON MEZQUITA

Ahí arrojados edificios, los picos, una mezquita solitaria
La cadena de pipas, a hurtadillas se desliza sobre el sitio de descarga
Detrás el Odenwald, las colinas ordenadamente desatadas
Carriles, creciendo implacable el verde en los muros contrafuegos, la floja
Baja a las bodegas la sombra de un Airbus, ok

[LANDSCHAFT MIT MOSCHEE

Dahin geworfene Gebáude, Spitzen, eine einsame Moschee
Die Kette der Tankwagen, die zum Umschlagplatz schleicht
Dahinter der Odenwald, die Hügel ordentlich aufgeschnürt
Gleise, hochschieSendes Grün an Brandmauern, die tráge
Auf die Lagerhallen senkt sich der Schatten eines Airbus, ok]

ATENAS

Como siempre permanece el calor en los guijarros
hasta que también la grava comienza a centellear.

Un augurio dirigido, un mensaje para ti.
Te inclinas y no es nada

como un algo tirado, una corona
que algún hombre sediento aquí transportaba.

La mujer, que buscas, no está aquí.
Ninguna diosa que te salve

antes del ocaso en las concurridas calles.
Bajas hasta el puerto.

Ahí esperan los transbordadores y se desgastan en melancolía
antes de que se arrastren en lo abierto.

[ATHEN

Wie immer steht die Hitze im Geroll
bis auch der Kies zu glitzern beginnt.

Bestimmt eine Verheifiung, eine Botschaft für dich.
Du bückst dich und es ist nichts

als ein hingeworfenes Etwas, ein Kronkorken
den irgendein durstiger Mann hierhin beforderte.

Die Frau, die du suchst, ist nicht hier.
Keine Gottin, die dich errettet

vor dem Abend in den belebten Strafien.
Du steigst hinab bis zum Hafen.

Dort warten die Fahren und dümpeln im Trübsinn
bevor sie sich ins Offene schleppen.]

AGUA FRÍA

En la orilla buscar piedras, periódico, chatarra.
Leer los signos, las distancias.
El verde notable y conforme con las reglas
cartografíado. Agitado, mira,
se desvia el Rhin bajo la autopista.
Un par de pasos hacia la
Industria que quedó abierta, a lo largo del agua fría
que niega sus componentes químicos.
Un parpadeo y lleva un buque de carga al mar.

[KALTES WASSER

Am Ufer Steine suchen, Zeitung, Schrott.
Die Zeichen lesen, die Entfernungen.
Das Grün beachtlich und nach den Regeln
kartographiert. Geschwungen, schau,
driftet der Rhein unter die Schnellstrafie.
Ein paar Schritte auf die aufgelassene
Industrie zugehen, langs des kalten Wassers
das seine chemischen Bestandteile leugnet.
Es blinzelt und tragt ein Frachtschiff zum Meer.]

HACIA TARASCÓN

En el bolso se agitan los utensilios
la blanda antracita, el álbum de dibujos en piel.

¿Somos lo bastante buenos para el arte o
sólo alcanzamos a garabatear?

Sólo un viajero mitad en luz
mitad en sombra. Los viajantes

agitan las cabezas, miran al frente.
Los monumentos, que él tanto odia

y no obstante vive con un ojo
al extranjero, hasta que le duele el nervio
óptico.

Desquiciados ojos negros, amigo mío.
Bajo las suelas pegada la ceniza.

[NACH TARASCÓN

In der Tasche schwanken die Utensilien
weiches Anthrazit, Skizzenbuch in Leder.

Sind wir hinreichend für Kunst oder
reichen wir blofi zum Schmieren?

Nur ein Anhalter halb im Licht
halb im Schatten. Die Reisenden aber

schwenken die Kopfe, blicken fort.
Die Sehenswürdigkeiten, wie hasst er sie

und dennoch lebt er vom Blick
auf das Fremde, bis der Sehnerv schmerzt.

Irre schwarze Augen, mein Freund.
Unter den Sohlen klebt Asche.]

GRUESA, CON HERODOTO

La luz es gruesa, como
esparcida. Tal vez se deja encontrar
en profundas capas. Sin embargo
ella se queda con manos limpias
toma mayor sensibilidad
y se va a la distancia. En lugar de
hablarse
, se besan en
la boca. Eso puede capturar,
eso está bien por hoy.

[GROBKORNIG, MIT HERODOT

Das Licht ist grobkornig, wie verstreut.
Vielleicht lasst es sich finden in tieferen
Schichten. Sie aber bleibt bei sauberen
Handen nimmt hohere Empfindlichkeit und
geht auf Abstand. Anstatt sich anzusprechen,
küssen sie sich
auf den Mund.
Das kann sie einfangen, das ist gut für heute. ]

AL BOSQUE (LOCUS AMOENUS)

Al bosque, exiges
las actividades, que nosotros
ahí hacemos, el follaje, las coníferas
un animal en la maleza,
¿cuál es? Es fugitivo y
le gusta la ponzoña (contagiar).
Acechas, recechas
escoges el sitio para
la íntima cita. Un
contagio, que a los troncos (arrastra).
Deseas el follaje, las coníferas
en la espalda. Un tímido animal
que se deja vencer.

[IN DEN WALD (LOCUS AMOENUS)

In den Wald, forderst du
die Tátigkeiten, die wir dort
verrichten, das Laub, die Nadeln
ein Tier im Unterholz, welches
ist es? Es ist flüchtig
und mag Krankheiten (übertragen).
Du lauerst, pirschst
bestimmst den Fleck für’s
lauschige Stelldich. Eine
Ansteckung, die an Stámmen (kriecht)
Du wünschst das Laub, die Nadeln
im Rücken. Ein scheues Tier
das sich beringen lásst.]

Adrian Kasnitz

Autor de los libros de poesía: Rei- chstag bei Regen, innere sicherheit, Den Tag zu langen Drahten y Schrumpfende Stadte, el libro de cuentos Die Maske y la novela Wodka und Oliven.

Fotografía de Adrian Kasnitz

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